miércoles

PUNTO Y COMA

de Estela Golovchenko
La hija: Adriana Tiscornia
La madre: Estela Golovchenko
El padre: Daro Rodríguez
Santiago: Leonardo Martínez
Dirección y Puesta en escena: Roberto Buschiazzo
Ante los mismos hechos los seres humanos reaccionamos en forma diferente, según nuestros propios mecanismos de defensa. Utilizamos los más variados recursos para sobreponernos a la injusticia, porque la vida debe continuar. Pero ¿en qué sentido?, ¿hacia qué dirección?
PUNTO Y COMA –ambiguo signo de puntuación gramatical-, implica detenerse ante el pasado para enfrentarlo definitivamente. El motivo, en este caso, es la certeza de la muerte cercana del padre, un ex activista político perseguido en la dictadura, ahora senador del oficialismo, que decide enfrentarse con su hija después de muchos años de ausencia. El lugar de la cita es el mismísimo despacho en el Palacio Legislativo, lugar donde se deberá dirimir sobre el pasado que tanto nos hostiga.
La memoria, protagonista incólume de la obra, aparece bajo los diferentes filtros de la personalidad de los personajes: la hija, el padre y Santiago, su asistente. Los tres dan una actitud distinta ante los mismos hechos, sintetizando reacciones propias de nuestra sociedad.
En un espacio común se entremezclan los tiempos, donde la madre desaparecida, el cuarto personaje, comparece en el presente.
La obra muestra, de manera sencilla y contundente, los mecanismos que los seres humanos encontramos para sobrevivir.